El Convento de Santa Clara fue construido a finales del siglo XVI, por orden del segundo capitán mayor de la isla de Madeira, João Gonçalves da Câmara, en las proximidades de la residencia de su padre, para reunir a las hijas de la nobleza local. El conjunto de edificaciones del convento de Santa Clara es un valioso patrimonio por su mobiliario, pero sobre todo por haber llegado hasta nuestros días con la misma misión para la que fue construido: un Convento de Hermanas Franciscanas. En el Convento podemos visitar: el Patio, la Capilla São Gonçalo de Amarante, posiblemente construida en el siglo XVII, un pórtico de acceso a los Coros y Claustro, y el Coro Bajo y Alto, con un hermoso panorama del interior de Santa Clara. Iglesia.
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